
Fic TOLL de Nathaly Kaulitz
Capítulo 18
Un demonio no puede amar, por qué amar significa albergar un sentimiento puro que solo fue echo para ángeles. Pero el amó aún si eso significa su propia destrucción, Tom Kaulitz me amó más que a nada en El mundo.
By: Bill
Aún recuerdo cómo se veían sus ojos cuando le decía te amo, aún recuerdo como su expresión se iluminaba y sus ojos se volvían brillantes de locura.
Sus palabras eran suaves, sus manos eran suaves, su boca era suave. Aún si estuviera echo para conocer solo lo rudo y áspero el encontró la manera de ser suave conmigo.
Fue en este día que mi mente me trajo de nuevo a los recuerdos que creí olvidados y perdidos.
» Te amo Bill Trumprer».
» Dime cuál es el problema que yo lo solucionaré «
» Haría cualquier cosa por ti Bill «.
— Oh dios no, no ahora, no.— El pánico se extendía por mí cuerpo la fea sensación de no poder respirar, de que iba a morir comenzó a ser aún más fuerte.— Por favor ahora no.
El ramo de rosas cayó al piso mientras me deslizaba en la pared hasta quedar de rodillas abrazándome, susurrándome a mí mismo que esto no podía estar sucediendo. Estaba perdido que ni siquiera escuché la puerta ser abierta.
— Oh no cariño que sucede.— Los brazos de mí abuela me rodearon y me abrazaron a su pecho . — Respira solo respira.
— No puedo abuela no puedo.
No podía porque simplemente aún seguía clavado como una estaca el hombre que deje atrás . No me permití pensar en el en todos estos años, solo quería seguir adelante y de esa forma no ser conciente de que jamás podría estar al lado de la única persona que es capas de ser mí otra mitad. No quise pensar porque sabía que si caía en la realidad todo mí mundo se volvería a destrozar.
— No puedo prometerle la eternidad a una persona que no amo. — Lloré.— ¿Cómo hacen esas personas que no aman a sus futuras parejas para decir si ¿Cómo pueden prometer estar al lado de aquella persona?.
— Mi niño antes cuando muchos hombres o mujeres como tú eran obligados a casarse con los jóvenes elegidos por sus padres, las madres siempre les decían los mismo.
— ¿Que les decían?.
— Con el tiempo aprenderás a amarlo.— Sus manos callosas de tanto trabajo acariciaban mí rostro suavemente mientras se podía ver en sus ojos iguales a los míos el reflejo de mí rostro bañado en angustia y tristeza. — El amor es un sentimiento que alberga un gran poder, puede cambiar al mundo, pude hacer que hasta el más arrogante de los arrogantes caiga rendido de rodillas pero sobre todo tiene el poder de destruir tu vida o volverla un cuento de hadas. No es algo que puedas aprender sin embargo pienso que si tú lo quieres quizás ese querer se pueda volver un profundo amor.
Nos miramos a los ojos y aquellas palabras que no pudieron ser dichas en voz altas se volvieron silenciosas a través de las miradas, ella y yo sabíamos que lo más probable era que jamás podría volver a amar de la manera que lo hice. Que esté amor que siento es tan poderoso que incluso puede llegar a destruirme por completo.
Intentaría como muchos jóvenes que en un tiempo atrás estuvieron obligados a cerrar su destino con alguien que no querían, lo intentaría amar aunque no estuviera obligado por nadie más que por mi mismo, porque sabía que esta era la siguiente página hacia una vida en la que Tom solo sería alguien borroso.
Se volvería mí recuerdo más preciado, codiciado y anhelado. Se volvería la prueba de que alguna vez sentí el amor, amor del apasionado y fogoso, el amor que tiene el poder de cambiar tu vida para siempre.
Tom Kaulitz sería la prueba de lo que sentí por el fue verdadero amor .
&
Las campanas dejaron de tocar. Los suaves sonetos se silenciaron y todos tomaron asiento.
El sol entraba por los grandes ventanales iluminándonos, se podía escuchar la relajante música que hacían los árboles moverse suavemente por el viento.
Todos estaban en silencio o quizás era yo el que no los escuchaba. Estaba tan concentrado en aquel muchacho que había frente mío, estaba concentrado en su sonrisa grande y brillante, en aquellos ojos que parecían dos estrellas brillantes y en su suave cabello castaño.
— Que bello es. — Pensé al verlo.— ¿Por qué no podía amarlo ?
— De Dios, responsables y amorosamente, los hijos y a educarlos según la ley de Cristo y de su iglesia?
— Si, estoy dispuesto.
— Si, estoy dispuesto.
Estoy conciente del aleteo de las palomas al volar y del olor refrescante que rodea a toda Toscana. Soy consciente que mí prometido me mira a los ojos con absoluta felicidad y que mí rostro solo es una máscara sonriente que no deja mostrar mí verdad. La verdad que estoy sintiendo y que no puedo gritar como realmente deseo hacerlo. Siento aquel dolor que creí haber sacado después de tantos años, siento mí corazón romperse dolorosamente .
Las lágrimas son calientes al deslizarse por mis mejillas pero no me preocupo por eso porque sé que el y todos los demás creen que es por felicidad aunque en realidad sean de verdadero dolor y tristeza.
— ¿Aceptas a Bill Trumper como tu esposo y prometes serle fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y pobreza, y amarlo y respetarlo todos los días de tu vida?. — Le pregunto el cura.
— Si lo acepto.— El me sonrió y acarició suavemente nuestras manos unidas.
—¿Aceptas a Ilan Ainsworth como tu esposo y prometes serle fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y pobreza, y amarlo y respetarlo todos los días de tu vida?
Sería como todas aquellas chicas, ellas fueron obligas a decir que si por sus padres yo soy obligado a decir que si por mí mismo. Porque mí alma lastimada desea la paz y la tranquilidad de un simple hogar, porque soy un cobarde.
Aquella prueba que el destino nos puso a mí a Tom fue demasiado grande, aquello me dijo que iba a ser una de muchas y tuve miedo. Miedo a perder más de lo que ya perdí, miedo a sufrir aún más de lo que sufrí al perder a mis bebés.
Demostré ser un cobarde y Tom demostró ser fuerte demostró que su amor por mí no tiene barreras ni tampoco reglas.
Yo no era para el, no lo merecía.
— Si, aceptó.
Perdóname mí amor y espero que con éste sacrificio seas capas de encontrar a una chica fuerte como tú que sea capas de merecerte.
Continúa…
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